Uno de los interrogantes más recurrentes que enfrentan las startups es: ¿cuál es el burn rate adecuado para mi proyecto? La realidad es que no existe una respuesta única y definitiva, ya que este indicador depende de múltiples factores, incluyendo la estrategia de la empresa, el sector en el que opera, el modelo de negocio y la fase de desarrollo en la que se encuentra, entre otros. Lo que sí es innegable es que medir y controlar el burn rate de forma recurrente es esencial, ya que tiene un impacto directo en la valoración de la startup y su capacidad de atraer a personas inversoras.
¿Qué es el burn rate?
El burn rate se refiere a la cantidad de capital que una startup gasta en un período determinado, normalmente mensual. Es un indicador que muestra lo rápido que una empresa está utilizando su capital disponible; un cálculo que es fundamental para la sostenibilidad a largo plazo del negocio. Para las startups, especialmente aquellas en fases iniciales, es normal tener un burn rate alto debido a la inversión en desarrollo de productos, marketing y adquisición de clientela. Sin embargo, el verdadero desafío radica en encontrar un equilibrio entre el crecimiento y la rentabilidad.
La importancia de medir el burn rate
Un burn rate controlado y bien medido es importante para tu startup por varias razones:
- Afecta la valoración: un burn rate alto puede desincentivar a las personas inversoras, quienes pueden considerar que la startup no está gestionando bien sus recursos.
- Influye en la invertibilidad: la forma en que se gestiona el burn rate impacta en la capacidad de la empresa para atraer inversiones futuras. Las personas inversoras buscan startups que demuestren una senda clara hacia la rentabilidad.
- Se adapta a objetivos de crecimiento: el equipo gestor debe optimizar el burn rate de acuerdo a los objetivos de crecimiento y rentabilidad establecidos. Esto incluye preparar estrategias para alcanzar el break even, es decir, el momento en el que los ingresos igualan los gastos.
Estadísticas reveladoras y perspectiva de inversión
Según estadísticas recientes, solo una de cada tres startups, especialmente en el sector de software como servicio (SaaS), que experimentan un crecimiento lento (menos del 50% anual), logran mantener la rentabilidad en el tiempo. En contraste, entre las empresas que aspiran a un crecimiento acelerado, solo una de cada diez logra este objetivo. Esto pone de manifiesto que la búsqueda de un crecimiento veloz no siempre es la solución más viable para asegurar la sostenibilidad financiera a largo plazo.
Desde la óptica de una persona inversora, es comprensible que las startups tengan un burn rate elevado. Sin embargo, es fundamental que cuenten con suficiente cash on hand para cubrir estos gastos. La clave está en encontrar un punto entre crecimiento y rentabilidad. Las startups deben ser capaces de adaptarse a su capacidad de caja, planificando la búsqueda de capital adicional (en rondas de financiación) cuando dispongan de al menos seis meses de liquidez. Lamentablemente, muchas startups entran en rondas de financiación con una situación de caja desfavorable, lo que limita su capacidad de negociación y puede conducir a términos menos favorables.
Recomendaciones para startups
Si estás pensando en levantar capital para tu startup, aquí tienes algunas recomendaciones que te serán útiles:
- Inicia con una posición favorable: los tiempos necesarios para levantar una ronda de capital se han dilatado, por lo que lo óptimo sería empezar a buscar capital adicional en una situación de fortaleza de caja. La mayoría de startups necesitan unos nueves meses para desarrollar todo el proceso, por lo que empezar a buscar capital con 12 meses de runway mejorará las perspectivas en el análisis. En palabras compartidas por la red de inversión en el Café&Inversión de Junio «hay que buscar capital cuando no se necesita».
- Controla y optimiza tu burn rate: revisar los gastos es un ejercicio que ha de realizarse con recurrencia, para garantizar que los recursos se emplean en las claves y puntos críticos de desarrollo del proyecto. Hacer escenarios (de mínimos y optimistas) puede ayudar a la gestión y toma de decisión en momentos en los que es necesario recortar gastos, alargar runway para tener una posición más favorable en el proceso de ronda
- Demuestra resiliencia: en momentos de incertidumbre económica, las personas inversoras valoran la capacidad de la empresa para resistir las dificultades y crecer de manera sostenida, aunque sea a un ritmo más lento.
Determinar el burn rate adecuado para una startup es un desafío que requiere un análisis cuidadoso de varios factores. La medición y el control del burn rate son esenciales para asegurar la viabilidad a largo plazo de cualquier proyecto empresarial. La búsqueda de un equilibrio entre crecimiento y rentabilidad, así como la capacidad de adaptarse a las circunstancias del mercado, son habilidades que todo equipo gestor debe dominar. Al final, el éxito radica en demostrar a las personas inversoras que se cuenta con una estrategia clara y un camino definido hacia la rentabilidad.
¿Crees que deberías revisar el burn rate de tu startup? Puedes empezar dando respuesta a estas preguntas para preparar el análisis para tu ronda:
- ¿Cuál es el burn rate bruto? ¿Y el neto?
- ¿Con cuánto runway se cuenta en el momento de la entrevista?
- ¿Cómo va a evolucionar el burn rate en los siguientes 12 meses? ¿y a 18 meses vista? ¿Por qué?
- ¿Cuáles son las principales partidas que afectan la variabilidad del burn rate? ¿Tienen sentido con el business model y go to market planteado?